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Redes Privadas Virtuales.
Una red privada virtual (VPN por sus siglas en inglés) es una tecnología que permite a los usuarios enviar y recibir datos a través de redes compartidas o públicas como si sus equipos informáticos estuvieran conectados directamente a la red privada.
Sirve de intermediario entre el dispositivo e Internet; al configurar y habilitar la VPN todo el tráfico pasa a través de ella, tanto envíos como recepción de datos. Una red privada virtual móvil es, además, capaz de mantener las sesiones abiertas sin importar los cambios en la conexión física, ya sea entre diferentes puntos de conexión o distintas IP.
Las VPN actúan como un túnel virtual encriptado entre un servidor host y el dispositivo, para que el usuario pueda realizar sus actividades en Internet de forma protegida. Se configuran a nivel de sistema operativo, en una red que captura toda conexión saliente. Esto significa que las VPN capturan el tráfico de cada una de las aplicaciones del equipo: desde navegadores hasta juegos online, pasando por actualizaciones de sistema que se ejecuten en segundo plano.
Los servicios VPN son utilizados por usuarios de todo tipo -no sólo profesionales de la seguridad informática- y su uso a nivel mundial va en aumento. Sin embargo, el uso de estas redes no está exento de riesgos, ya que no todas son fiables. Pese a que el uso de una VPN te permite mantener tu anonimato, requiere confianza en el proveedor, especialmente si tienes que acceder a sitios web sensibles. El uso de redes profesionales, como Panda VPN, garantiza una protección adecuada para tus actividades con el aval de una empresa de seguridad.
Este proceso es especialmente importante cuando se utilizan equipos móviles, que a menudo se conectan a redes WiFi públicas, como las de hoteles y aeropuertos, que no siempre son seguras. Por eso muchas empresas utilizan estas VPN para que sus empleados tengan acceso a su propia intranet local o red corporativa de forma remota. Una VPN se puede configurar en cualquier dispositivo que tenga instalado el cliente, por lo que no importa la ubicación del usuario.
Los servicios VPN proporcionan una capa extra de seguridad; permiten acceder a contenidos georrestringidos, ocultan el tráfico web de tu proveedor de servicios de Internet y esconden tu ubicación y actividades online. Gracias a una potente encriptación, sólo el servidor host de la VPN puede acceder a toda esta información.
Los proveedores de VPN para móviles permiten mantener una conexión nómada; es decir que no se realiza desde un punto fijo, sino en movimiento (por ejemplo, cuando los usuarios circulan entre diferentes redes móviles o puntos de acceso WiFi). Una VPN móvil mantiene la conexión virtual a cada aplicación en todo momento, aunque se cambie la ubicación, manejando los inicios de sesión de red necesarios de una manera transparente para el usuario.
Las VPN pueden ayudar a establecer parámetros de navegación más seguros y a bloquear anuncios y amenazas potenciales, incluso durante los desplazamientos. Al igual que con las redes fijas, el tráfico también es encriptado y sólo emisor y remitente tienen acceso a la lectura de esa información. Se pueden utilizar la VPN móviles para cifrar datos en el dispositivo antes de enviarlos, de manera que sólo puedan ser descifrados por un servidor específico, sin que esto afecte al resto del tráfico.