El avance del bitcoin hacia su aceptación en el sector financiero internacional ha superado una nueva etapa y, de paso, su valor ha alcanzado un nuevo máximo. La criptomoneda se disparó hasta los 58,45 euros tras el lanzamiento en Wall Street del primer fondo de inversión cotizado dedicado a bitcoin, novedad que ha aumentado drásticamente la exposición de la criptodivisa a los inversores y que ha estado precedida de gran atención mediática. Se trata de la primera vez que los inversores pueden negociar en el mercado de valores con un activo relacionado con una divisa de este tipo.

Un fondo de inversión cotizado (ETF por sus siglas en inglés) es un tipo de valor financiero ligado a un índice, un sector, una materia prima u otro activo, que puede comprarse o venderse en un mercado de valores, lo mismo que una acción normal. En este caso el nuevo ETF, denominado ProShares Bitcoin Strategy ETF (o BITO), permite a los inversores especular sobre las fluctuaciones del valor del bitcoin sin que tengan que pasar por el proceso de compra de las propias monedas.

Así, BITO comenzó a cotizar a 35,41 euros (40 dólares) por acción y terminó su primera jornada con una subida del 5%, registrando un volumen total de unos 504,64 millones de euros (570 millones de dólares) de activos, lo que lo convierte en el segundo ETF más negociado de la historia en su primer día. Y el impacto en el precio del bitcoin ha sido extraordinario: se disparó por encima de su máximo histórico hasta un nuevo récord de 58,323 euros a principios de noviembre (más del doble respecto al pasado julio, cuando el bitcoin alcanzó un mínimo de menos de 25,288 euros).

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Cambio de tendencia

Anteriormente, varias instituciones financieras habían intentado obtener la aprobación de un ETF basado en bitcoin, sin éxito. Hasta ahora la Securities and Exchange Commission (SEC, la agencia gubernamental estadounidense que protege a los inversores) se había mostrado reacia a dar luz verde, ante la inestabilidad que podría causar la intensa volatilidad del bitcoin, así como por la preocupación general por una industria no regulada. Gary Gensler, presidente de la SEC, afirmó que la comisión se sentía más cómoda con un tipo particular de fondos de inversión, en concreto los ETF basados en el futuro, ya que cotizan en un mercado regulado.

Aunque los inversores estadounidenses ya podían comprar algunos productos pasando por el Chicago Mercantile Exchange y en bolsas no reguladas, como BitMEX, el lanzamiento de una ETF aprobada por la SEC abre el mercado a una mayor variedad de inversores, incluidos los fondos de pensiones, y se suma a la creciente aceptación del bitcoin en mercados financieros. Se inscribe además en un importante cambio de rumbo de la SEC, ocurrido desde que Gensler llegó a la dirección en abril de 2021.

Otros fondos de inversión que estaban estudiando las novedades en las criptomonedas se verán sin duda alentados por la experiencia de BITO, y se espera que haya nuevos productos ligados a bitcoin en las próximas semanas. Invesco, VanEck, Valkyrie y Galaxy Digital ya han mostrado su interés. Se trata de un importante hito que hará que la inversión en criptomonedas sea más fácil y más utilizada, y un paso importante para su adopción en las finanzas convencionales.