Medidas de ciberseguridad para evitar ser víctima del porno de venganza
El libre intercambio de información en la red significa que millones de personas en todo el mundo tienen a su alcance archivos y datos de todo tipo. Esta democratización del acceso y la publicación implica que hoy en día los usuarios deben ser más cuidadosos que nunca con aquellos elementos de su vida susceptibles de aparecer en Internet.
En los últimos años tendencias como el sexting (envío de imágenes y otro tipo de contenido íntimosas a través plataformas online) han multiplicado los casos de revenge porn; es decir, difusión sin consentimiento por parte de sus dueños de fotos o vídeos de contenido sexual en la red. Los objetivos son principalmente mujeres jóvenes y, en muchos casos, tiene que ver con exparejas u otras personas que pretenden humillar y atacar la reputación de las víctimas a través de la publicación de este tipo de imágenes.
Para evitar caer en este tipo de ataques puedes seguir algunas de las pautas que te explicamos a continuación:
- Aunque suene obvio, la medida de prevención más simple es no aparecer en fotografías comprometidas. Una vez que un archivo se digitaliza, surgen inevitablemente los riesgos derivados del intercambio de datos, de su publicación sin permiso, de robos de dispositivos o de hackeos. Hoy en día todos los móviles, tablets y ordenadores suponen un riesgo, ya que todos están conectados a la red en un momento u otro y la gran mayoría de ellos no disponen de una protección básica.
- En caso de que finalmente decidas enviar imágenes o archivos, conviene que mantengas ciertas medidas de seguridad. En este sentido es aconsejable encriptar tus datos para, al menos, dificultar el acceso de terceros. También puedes optar por aplicaciones que borran el contenido a los pocos segundos.
- Instala en tus dispositivos una solución de seguridad inteligente que proteja específicamente contra estas amenazas. La protección de datos que se incluye en los productos Panda, por ejemplo, ofrece una capa de defensa adicional frente a ataques de malware que intenten acceder a los datos sensibles.
- No almacenes imágenes de otras personas desnudas o en ropa interior en tus dispositivos. Ni vídeos grabados entre amigos como broma, ni fotos de menores de tu familia en vacaciones, ni imágenes de antiguas parejas, si almacenas algo cifra el contenido y pon una clave de acceso. Y si alguien dispone de imágenes tuyas, asegúrate de que las eliminan.
- Las víctimas de revenge porn son, a menudo, jóvenes o adolescentes. Como en muchos problemas que pueden surgir de la actividad online, la comunicación entre padres e hijos es fundamental no sólo para prevenir, sino también para resolver conflictos. Como explican los expertos de la Policía Nacional, que los jóvenes conozcan los riesgos y las precauciones es clave.
- Si alguien publica fotos tuyas intimasíntimas o no sin tu autorización es violencia sexual, aunque no sea física, pero sí psicológica, es un delito. Denúncialo ante los organismos pertinentes, tanto la Brigada de Investigación Tecnológica de la Policía Nacional, como el Grupo de Delitos Telemáticos la Guardia Civil. También puedes acudir a webs como Protección Online, especializadas en la concienciación contra este tipo de prácticas.
- No subas información sensible a ninguna plataforma. Esto incluye redes sociales, webs de contactos o programas de mensajería instantánea. En caso de que descubras que alguien ha enviado imágenes tuyas a cualquiera de estos sitios, tienes derecho a contactar directamente con el administrador y exigir que sean retiradas de inmediato.
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