La industria del juego online es uno de los sectores digitales con mayor crecimiento. Pero también una de las áreas en las que, además del dinero, pueden estar en juego los datos personales de los usuarios. Conocer los riesgos y estar prevenido es la mejor manera para evitar un robo de datos y la suplantación de identidad en los casinos online.
El crecimiento de las apuestas online y sus riesgos asociados
Fornite, League of Legends, Brawl Stars, Call of Duty: Warzone 2.0, Escape from Tarkov o Fall Guys son algunos de los juegos online más populares en 2024. A estos se les unen los casinos en línea y otros juegos de azar como el bingo o las apuestas deportivas. Y todos pueden convertirse en la puerta de entrada de malware y virus que ponen en jaque las cuentas y los datos de los jugadores. Sin embargo, son los juegos en los que se apuesta a los que la Dirección General de Ordenación del Juego (DGOJ) les aplica un control anual para establecer sus movimientos en ingresos y actividad. Según el último informe trimestral de 2024, durante el periodo de octubre a diciembre del pasado ejercicio se experimentó un importante crecimiento.
Impacto del crecimiento en la ciberseguridad
El índice GGR (Gross Gaming Revenue), que en el mundo de las apuestas mide el bruto por recaudaciones de juego, alcanzó en el cuarto trimestre de 2024 los 409,33 millones de euros. Esto supone un incremento del 17,57% respecto al tercer trimestre del mismo año y un 29,82% frente al mismo periodo de 2023. Además, el gasto en marketing creció un 23,65% en comparación con el trimestre anterior. Lo que implica una mayor inversión en la captación de nuevos jugadores y en la retención de clientes.
Si se analiza este crecimiento por segmentos, se observa que el de las apuestas deportivas es el que más ha crecido en este periodo. Con un aumento del 30,28% respecto al trimestre anterior y del 54,39% en términos interanuales. Le sigue el póquer online, con un aumento del 24,49% respecto al tercer trimestre, el casino online con un crecimiento del 8,07% y el bingo online con un aumento del 5,21%. Sin embargo, si se atiende a los valores absolutos es el casino online el que aporta más ingresos. Con 203,16 millones de euros (49,63% del total). Seguido de las apuestas deportivas (177,12 millones de euros), el póquer online (25,55 millones de euros) y el bingo online (3,48 millones de euros).
La suplantación de identidad, un problema en alza
Este tipo de juegos no sólo pueden suponer un riesgo para la salud mental de muchos usuarios susceptibles de padecer una adicción. También según datos del Ministerio de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030, un riesgo de ciberseguridad. Porque, tal y como apuntó esta institución, el año pasado se registraron casi 8.000 denuncias (7.712) de personas que aseguraron haber sido víctimas de suplantación de identidad en el juego online. Es la primera vez que se conoce este dato, porque no ha sido hasta ahora cuando se ha activado el protocolo de Consumo para, por medio de la Dirección General de Ordenación del Juego, proteger a los contribuyentes de estas acciones en el ámbito online.
Las cifras son preocupantes, ya que, tras el cierre de la campaña de la Renta 2023, la Dirección General de Ordenación del Juego, ha detectado que de todas las personas que ganaron más de 100 euros en juegos online, casi un 5% (4,7%) fueron víctimas de suplantación de identidad, según las denuncias presentadas. Un porcentaje que, además, podría aumentar este año en base a los datos preliminares que ya se conocen del próximo ejercicio fiscal.
Los riesgos de la suplantación de identidad en los juegos online
Según advierte la Dirección General de Ordenación del Juego, las personas que suplantan la identidad de los usuarios utilizan métodos de pago difíciles de rastrear y que no se pueden verificar en tiempo real. Como monederos electrónicos y tarjetas bancarias. Y presentan un patrón de juego diferente, ya que apuestan más veces y durante más horas al día pero usando las cuentas suplantadas sólo 7,5 días de media. Poco más de 28 días menos de lo que es habitual.
El uso de identidades de familiares y conocidos es otro de los patrones más comunes en la suplantación de identidad. Especialmente en el caso de menores de edad y de personas inscritas en el Registro General de Interdicciones de Acceso al Juego o en personas que han sido bloqueadas por los operadores. Pero también, el robo de identidad responde a fines fraudulentos, tanto para evitar pago de impuestos como para realizar operaciones ilícitas.
Para eludir estos robos, expertos como Hervé Lambert, Global Consumer Manager de Panda Security, aconseja “evitar dar información personal en los chats de los juegos online, porque los delincuentes suelen utilizar esta función para recopilar datos confidenciales como el nombre completo, el teléfono o la dirección postal”. Los chats también pueden ser coladero para el phishing y para el ciberacoso.
Otros peligros de los juegos en línea
Los riesgos en este campo no se limitan a los juegos de apuestas. Los videojuegos en línea también pueden ser la puerta de entrada de virus y malware cuando se descargan actualizaciones no verificadas, cuando se accede a códigos de trucos o se compran productos a través de terceros. Y, una vez instalado ese malware en el ordenador los ciberdelincuentes pueden robar información personal.
También se pone en riesgo la seguridad de los dispositivos que se usan para jugar online cuando se utilizan el mismo nombre y contraseña. Porque se les ponen las cosas fáciles a los piratas para apropiarse de sus cuentas. Y, en ocasiones, los jugadores pueden convertirse en víctimas de ataques de spyware, sobre todo cuando juegan a videojuegos poco fiables.
“Es imprescindible que los jugadores se aseguren de que están utilizando videojuegos certificados y actualizaciones verificadas. Así evitan el scripting entre sitios (XXS), que es una técnica de piratería que permite a los delincuentes interceptar y robar datos valiéndose de la vulnerabilidad de sitios más antiguos”, advierte Lambert.
Para eludir estos riesgos “lo primero es usar el sentido común”, señala el directivo de Panda Security. “Y utilizar contraseñas seguras e ir cambiándolas periódicamente y en función del juego; descargar las actualizaciones siempre de fuentes legítimas; estar atentos a gastos ocultos y a correos electrónicos no verificados”.