6 consejos de ciberseguridad para no llevarse un susto en San Valentín
Los días cercanos a San Valentín son una de esas fechas del año en las que algunos cibercriminales suelen hacer su particular “agosto”. Aprovechando el tirón que tienen las redes sociales de citas y que muchas personas andan en este momento del año algo más susceptibles de lo habitual por no tener pareja, los hackers aprovechan para engañar y beneficiarse de los más desprevenidos.
El estado de enamoramiento suele producir comportamientos poco habituales en las personas, pero que sociológicamente se pueden etiquetar por patrones de conducta. Esto lo saben bien los cibercriminales que, sirviéndose de fotos falsas y diciéndole a sus víctimas todo aquello que esperan oír, son capaces de seducirlas y aprovecharse de ellas.
Independientemente de la red social que utilicemos para ligar, ya sean las más modernas como Tinder o Happn, o las más “clásicas” como Meetic o Badoo, “es importante tener en cuenta que cuando no conocemos personalmente ni tenemos referencias de la persona con la que hablamos por medio de alguna de estas apps, no tenemos ninguna garantía de que sea alguien de fiar”, advierte Hervé Lambert, Global Consumer Operations Manager de Panda Security
No confíes en gente a la que no conoces
Lo primero de todo y más importante es tener en cuenta que entre los miles de usuarios que hay en estas redes sociales, hay algún cibercriminal escondido. Por lo tanto, es imprescindible no tomar confianza desde el primer momento con la persona con la que has contactado.
Cuidado con los que solo quieren una “amistad digital”
Las personas que insisten en tener una amistad por la red social, pero que siempre encuentran una excusa para que no las conozcas físicamente, pueden ser malintencionados o gente que están recabando toda la información posible sobre ti, para luego hacerte algún tipo de chantaje o incluso robar en tu casa cuando sepan que no vas a estar allí o gente que se quiere aprovechar de tus sentimientos para engañarte.
No compartas información sensible
Aun así, tampoco es recomendable darle información sobre ti a un desconocido. Por ello, hay que poner especial atención en no mandar fotos ni vídeos comprometidos que más tarde podrían convertirse en virales, como ha ocurrido ya muchas veces. No te engañes, estas cosas no les pasan únicamente a las estrellas de cine, cualquier foto subida de tono que envíes puede extenderse como la pólvora por Internet y acarrearte serios disgustos.
Si os desvirtualizáis, quedad en un sitio público
Lo que está claro, es que una de las principales funciones de estas apps es conocer en persona a gente nueva. Si eres usuario de alguna de estas redes sociales, tarde o temprano acabarás quedando con alguno de tus “matchs”. Aun así, deberías tener en cuenta queque, aunque la persona que estás a punto de conocer parecía encantadora en los mensajes que os mandabais, todavía no es alguien de tu confianza, eso si esperamos que lo sea, pero paso a paso y con cuidado.
Por ello, si optas por ver en persona a tu match, asegúrate de que quedáis en algún lugar público en el que haya más gente. Y, por supuesto, antes de salir de casa avisa a algún amigo o familiar de que has quedado con alguien con quien vas a tener una “cita a ciegas”.
Cuidado con las integraciones con otras redes sociales
Muchas de estas redes sociales para ligar, como es el caso de Tinder, permiten configurar tu perfil importando la información que ya tienes en Facebook. Esto no es lo más recomendable si quieres mantener tu privacidad, ya que, si haces match con alguien, le será mucho más fácil encontrar tu perfil en Facebook y tener más información sobre ti.
Desconfía de las apps que ofrecen funcionalidades no incluidas en Tinder
Ser muy celoso no es bueno, pero usar aplicaciones para espiar la red social en busca de tu pareja y saber si liga con otras personas es aún peor.
Aunque hay alguna app que se conecta a la API de Tinder para buscar perfiles en función de algunos parámetros como el nombre o su cuenta de correo electrónico, se trata de procesos que bordean la legalidad. Además, cuando alguien te ofrece algo que una red social por principio no da, lo más adecuado es desconfiar.
Sin ir más lejos, hace algunos meses se hizo público que no hay forma de saber quién ve tus fotos de Instagram y que las ‘apps’ que lo prometen son un fraude.Si encuentras aplicaciones que ofrecen datos que Tinder no da a sus usuarios, mejor no te las descargues, podrían esconder algún malware que acabaría generándote algún que otro susto.