Firewall

El firewall actúa como una barrera entre tu ordenador y la red. Su función principal es controlar el tráfico de datos entrante y saliente, permitiendo o bloqueando las conexiones según las reglas de seguridad predefinidas.

El firewall utiliza reglas preestablecidas y personalizables para determinar qué tipo de tráfico se permite y cuál se bloquea. Por defecto, bloquea todo el tráfico entrante no solicitado para evitar ataques cibernéticos, como intentos de intrusión. Estás reglas se pueden establecer a través de su configuración avanzada.

El firewall puede detectar intentos de intrusión, como escaneo de puertos y ataques de fuerza bruta. Cuando se detecta actividad sospechosa, el firewall puede bloquear la dirección IP del atacante para proteger tu sistema.

Además de las reglas de filtrado de puertos, el firewall puede controlar qué aplicaciones pueden acceder a Internet. Puedes configurar reglas específicas para permitir o bloquear aplicaciones individuales, lo que te da un mayor control sobre tu sistema.

El cortafuego también puede adaptarse a diferentes perfiles de red, como redes públicas y privadas. Por ejemplo, puede configurarse para ser más restrictivo en una red pública y permitir un acceso más amplio en una red privada.

Nuestro firewall genera alertas y registros de eventos para mantenerte informado sobre actividades sospechosas o bloqueos de conexiones. Esto te permite tomar medidas si se detecta un comportamiento inusual.

Esta característica funciona tanto para el tráfico entrante como para el saliente, lo que significa que no solo protege tu sistema contra amenazas externas, sino que también supervisa y controla las comunicaciones que salen de tu ordenador.